Transfórmate en tu mejor versión. Esta es mi historia.

Hace poco más de dos décadas que comencé mi carrera profesional. Siembre tuve muy claro que hiciera lo que hiciera en mi vida, estaría ligado a un mismo hilo conductor; la orientación a las personas.

Ayudar, entender y acompañar eran los pilares sobre los que quería construir mi futuro, por lo tanto, la opción más natural para mí fue estudiar Psicología. Lo que no podía saber en aquel momento era que esa carrera se convertiría en mi gran pasión y en el disparo de salida a todo lo que estaba por llegar. Durante la universidad, en esos momentos imaginarios que tenemos todos. Esos momento íntimos donde visualizas una posible, e idílica, vida futura, siempre me veía atendiendo pacientes en una consulta tradicional. Poco sabía entonces de las sorpresas que me depararía el camino, y claro, a grandes cambios, grandes reinvenciones.

Fui construyendo mi futuro paso a paso, sin prisa, buscando la claridad en ese camino incierto y lleno de acontecimientos inesperados.
Y hablando de acontecimientos…

Reinventarse

Hay tres episodios que tienen una relevancia absoluta en mi vida. Tres carreteras en un mismo cruce. Tres eventos que sucedieron porque yo misma, sin tener plena consciencia, activé los mecanismos para que sucedieran. Tres coordenadas que trazaron las líneas del mapa que me llevaría hasta hoy.

• El primer desafío que me llevó a reinventarme fue tener la oportunidad de llevar una exitosa carrera corporativa en Recursos Humanos.
• La segunda aventura fue la de formar una hermosa familia. Este es, sin duda, el reto más importante de toda mi vida. Ser madre de dos hijas maravillosas y del mejor hijo del mundo.
• El tercer suceso fue tomar la decisión de fundar una startup que se ha convertido en una empresa multinacional.

En mi camino como emprendedora, decidí evolucionar y ceder el espacio de confort y especialización que había generado durante esos años en RRHH, para aterrizar en el desconocido y delicado mundo de las finanzas. Esta travesía apasionante y llena de aprendizaje me empujó a reinventarme nuevamente. No podía delegar la parte financiera a alguien externo, así que decidí aprender de gestión de liquidez, de fiscalidad, de líneas de crédito, de gestión bancaria, etc.

Inicialmente, la empresa de servicios de la que fui cofundadora, iba a ser una empresa familiar, o al menos eso creía yo, sin embargo, en 10 años de arduo trabajo, conseguimos crear un equipo de 700 personas, y dar el salto multinacional logrando tener presencia en 4 países.

¿Qué es el éxito?

El termino Éxito proviene del latín exĭtus, que significa «Salida» de ahí se determina que Éxito se refiere al resultado final y satisfactorio de una tarea. Nunca podemos decir que sea el final, porque quizás es el principio de otra etapa. Lo importante es que había conseguido el objetivo marcado y las circunstancias me daban la oportunidad de ELEGIR.

¿Cuál es tu proceso? ¿Dónde te encuentras ahora? ¿Tienes claros tus objetivos?. Date las oportunidades necesarias para encontrar tu camino. Reinventarse es darse una segunda oportunidad.

Comenzar un nuevo proceso en tu vida, sea cual sea, laboral o personal, asumir nuevos cambios y cerrar etapas, puede ser una ardua tarea en la que es importante contar con el apoyo necesario para tomar las decisiones correctas. La sensación de ansiedad respecto a lo nuevo puede ser abrumadora y sentir que no vas a la deriva es fundamental. Llegados a este punto de mi historia, ya contaba con la experiencia, la pasión y las personas adecuadas a mi lado para enfocarme en mi verdadera vocación.

Mi versión 3.0.

Eso del ciclo de la vida tiene mucho sentido.

Tarde o temprano, la rueda nos devuelve al principio, a nuestro sentir base. Y mi pasión primaria siempre ha sido conocer a las personas en profundidad, navegar en sus motivaciones, descubrir sus deseos escondidos tras sus acciones, comprender sus objetivos y los mecanismos para acercarse a ellos, entender sus debilidades, ayudarles a solventarlas, etc. Mis dos áreas profesionales me han ayudado a entender más todo esto.

En el mundo de la empresa descubrí cómo la individualidad de cada persona se proyecta en lo grupal, y viceversa, y cómo sin darnos cuenta repetimos en estos ámbitos profesionales todo aquello que hacemos en nuestra vida personal.
Mi otra pasión, la psicología clínica, en la que nunca he dejado de formarme ni de trabajar en distintas áreas de la misma, me ha preparado para escuchar y orientar a las personas a vencer sus inhibiciones, conocer sus impulsos, sus deseos o miedos, y acompañarles en la emocionante tarea de la superación personal.

Ambas ramas me enriquecieron con diversas experiencias vitales.
Mi vida personal me ha ayudado a ser flexible al cambio, a afrontar nuevos retos sin miedo, a comprender que somos capaces de sacar fuerzas cuando pensábamos que ya no quedaban, a confiar en los demás… En definitiva, vivir me hizo aprender.
Todo esto me enseñó a no cerrarme a lo establecido y a ser capaz de abrir el abanico de posibilidades que me trajo hasta aquí, al final de estas líneas, donde ahora puedo decir orgullosa que nace PROYECTA desde mi versión renovada, mi versión 3.0, donde me reinvento nuevamente. Y esta vez, también es para reinventarte a ti.

Miremos juntos para adentro. Yo te acompaño a dar el salto.

Tú PROYECTA.